Con este calor infernal, es fundamental mantenernos bien hidratados, especialmente cuando decidimos hacer ejercicio, ya sea en el gimnasio o al aire libre.
Y aunque el agua y las bebidas isotónicas frías son opciones obvias, muchos no pueden evitar pensar en una cerveza bien fría después de una intensa sesión de entrenamiento.
Después de todo, una cerveza fresca suena como la recompensa perfecta tras haberte esforzado y darlo todo en tu entrenamiento. Pero, ¿es realmente una buena idea?
La cuestión de si es saludable o no tomarse una cerveza después de ejercitarse ha dividido opiniones en el mundo de la salud y el fitness. Médicos, entrenadores, nutriólogos y deportistas tienen mucho que decir al respecto, y no todos están de acuerdo.
Algunos expertos dicen que una cerveza puede ser aceptable y otros advierten sobre los posibles efectos negativos del alcohol, como la deshidratación.
Hoy en día, también hay cervezas sin alcohol y sin calorías en el mercado, aunque no siempre son del agrado de quienes buscan esa «recompensa» tras un entrenamiento intenso.
La reacción de nuestro cuerpo al tomar cerveza después de ejercitarse depende de varios factores, como la edad, el sexo, la disciplina que se practica, los hábitos alimenticios y la tolerancia al alcohol.
No cabe duda de que la cerveza es refrescante y deliciosa, pero también es diurética. Por lo tanto, no es recomendable beber más de una ni mucho menos usarla como tu principal fuente de hidratación después de hacer ejercicio.
Para que tengas una idea clara de lo que estás consumiendo, aquí te dejamos una tabla con los minerales y nutrientes que contiene una cerveza regular y una sin alcohol:
Cerveza regular de 360 ml:
- 155 calorías
- 13 gramos de carbohidratos
- 14.4 miligramos de calcio
- .072 miligramos de hierro
- 21.6 miligramos de magnesio
- 97.2 miligramos de potasio
- 14.4 miligramos de sodio
- .018 miligramos de tiamina
- .09 miligramos de riboflavina
- .166 miligramos de Vitamina B6
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Cerveza sin alcohol de 360 ml:
- 104 calorías
- 6 gramos de carbohidratos
- 14.4 miligramos de calcio
- .108 miligramos de hierro
- 18 miligramos de magnesio
- 75.6 miligramos de potasio
- 14.4 miligramos de sodio
- .018 miligramos de tiamina
- .054 miligramos de riboflavina
- .122 miligramos de Vitamina B6
Si se te antoja una cerveza después de entrenar, adelante, ¡pero con moderación! Recuerda que tu cuerpo necesita rehidratarse adecuadamente y que hay otras opciones más saludables para hacerlo.
Y si decides por la opción sin alcohol, es probable que estés haciendo una elección más benéfica para tu recuperación. ¡Salud y buen entrenamiento!
